Este vino debe su nombre al propietario que plantó este viñedo, que por su mal carácter recibió el apodo de "el veneno"
No todo iba a ser malo y en legado nos dejó este magnífico viñedo en vaso, en estricto secano, plantado sobre tierras de arrastre franco-arenosas, con muchísima piedra en un entorno ideal y mediterráneo que ahora cultivamos de forma sostenible con el medio ambiente
Monastrell 100% elaborado con mucho racimo entero y con el 50% de raspa
Criado 12 meses en barricas de 500 litros de roble francés allier
Vino de gran equilibrio donde predominan los aromas mediterráneos como la lavanda, romero, eucaliptus y balsámicos.